Hacer compost es algo que nunca me imaginé haciendo en la vida, pero cuando llega el momento de recoger el compost hecho, es como Navidad para mis plantas (y para mí, para que mentir 😉
En este post explicaré los conceptos básicos sobre el compost y la diferencia con el humus.
La lechuga es posiblemente una de las primeras adiciones a un nuevo macetohuerto, por lo fácil: compras un plantel, lo pones en sustrato y con un poco de agua y algo de sol en un mes ya puedes hacerte una ensalada.
Pero parece haber una percepción entre algunos macetohuerteros que cultivar lechugas desde semillas es complicado, lleva muy tiempo y esfuerzo, y no es así.
En este post explicaré paso a paso cómo siembro las lechugas y las cultivo en macetas. Espero que te de ánimos y te animes a cultivar lechugas desde semillas en maceta.
No hay nada más fácil en el huerto urbano que cultivar cebollas en macetas. Es tan fácil que parece raro que no haya cebollas en macetas en cada balcón y patio! Comparto aquí cómo lo hago y los resultados que he tenido hasta ahora.
Tras haber leído un artículo muy interesante en Mother Earth News, en Diciembre del año pasado decidí hacer un experimento: crear una «lasagna» en mis cajas, es decir, hacer compost de superficie y plantar directamente.
Este es un mega-post, donde comparto el proceso y el resultado tras 6 meses de preparación y cultivos.
Hacer semilleros es uno de los aspectos más delicados de todo el proceso de tener un huerto. Es irónico que si un tomate o semillas de lechugas caen en la tierra, a la primera siguiente germinarán solas, donde y cuando les mejor parezca (como me ha pasado y está pasando).
Sin embargo, hacer un semillero y hacer que crezcan plantas sanas y fuertes es más fácil dicho que hecho. He tenido éxitos pero también estrepitosos fracasos y aquí resumo mi corta pero intensa experiencia.
Cultivar tomates en macetas puede ser un desafío grande: calor, agua, espacio, viento, bichos, hongos. He utilizado todas las variedades que tenía disponibles, para ver qué diferencia había, y éste ha sido el resultado de mi primer intento a crecer tomates en macetas:
Cebollas y lechugas
Depende.
Los planteles son una gran solución cuando te has quedado sin tiempo para plantar algo, si eres impaciente o estás teniendo problemas con la germinación (por ejemplo, poca luz y se espigan, mucha agua y se llenan de moho, mucho frío, etc).
Siendo la novata que soy compré algunos planteles para una de las cajas para que no quedara «pelada» tanto tiempo. Desde el garbanzo en algodón no había germinado nada, hacía frío (Febrero) y no tenía (aún) invernadero…
Fácil. Multiplica el largo por el ancho por la altura (largo x ancho x alto), como en el siguiente ejemplo:
Caja de 1,20mts cuadrado
Hay tantos métodos diferentes para crear y mantener un huerto que la elección al final es totalmente personal. En mi caso escogí seguir el método «creado» por Mel Bartholomew en los años 80. Se llama (sorpresa sorpresa) Huerto del Metro Cuadrado («Square Foot Gardening»).
La elección de crear un «macetohuerto» vino, en mi caso, ya dada por estar de alquiler – a pesar de tener suficiente terreno para un par de largos bancales.
Pero aunque pudiese crear un bancal, entre que tengo la espalda tocada y que la idea de tener que remover continuamente el ecosistema de la tierra no me agrada mucho, un huerto en cajas, mesas o macetas es la única elección (de momento) para mí.
Con respecto al método, hay 4 reglas básicas y muy simples a seguir:
Antes de comenzar, una confesión: hasta hace un año la única experiencia que tuve de crecer algo fue el mítico garbanzo en algodón mojado, experimento obligado del cole allá cuando tenía unos 9 añitos.
Sabía que hay algo fundamentalmente mal en nuestra dieta de «sin tiempo, mucho plástico»: verduras y frutas sin gusto y que se pudren en cuestión de pocos días, un incremento alarmante de enfermedades auto-inmunes y alergias e intolerancias alimenticias, entre muchas otras patologías.
Y algo quería, necesitaba hacer…
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